Hace unos días el diario El Tiempo publicó un fotorreportaje sobre la rumba gay en Bogotá que fueron acompañadas con la frase “las siguientes imágenes tienen contenido explícito y pueden herir susceptibilidades”. ¿Por qué?
Por: Camilo Jaramillo, estudiante de doctorado en Lenguas Romances.
Un bar bastante concurrido había organizado una fiesta donde algunos reconocidos actores porno darían un show de sexo en vivo que amenizaría la fiesta.
El periódico El tiempo publicó una serie de fotos mostrando una rumba de fin de semana y, entre estas, algunas de los actores en medio de su show.
Como es de esperarse, estas últimas sólo revelaban lo que un medio al alcance de todos puede revelar: mucha piel, poses sugerentes y nada más.
Lo que cautivó más mi atención, sin embargo, no fue ninguna de las imágenes, sino la advertencia que los editores consideraron necesario agregar: “las siguientes imágenes tienen contenido explícito y pueden herir susceptibilidades”.
Empecemos por el principio. Claro, las fotos contenían sugerencias eróticas, pero no lo suficientemente explícitas para que El Tiempo dejara de publicarlas. ¿A qué se debe, entonces, su advertencia? Si el diario hubiera realmente considerado que estas fotos eran problemáticas ¿por qué las publicó? ¿Sería acaso por un poco de amarillismo?
El Tiempo sí que se caracteriza por su amarillismo a veces, pero en este caso su advertencia no se debe a esto. Las fotos eran poco problemáticas y no implicaban un riesgo editorial en tanto a su contenido erótico.
Persiste, entonces, la pregunta. ¿Por qué la advertencia? Despejado el hecho de que la recomendación se debiera a un alto contenido sexual de las imágenes, no queda otro motivo que la explique: la homofobia.
Esta advertencia no puede pasar desapercibida. Carece de objetividad y refuerza la homofobia social. Reafirma los prejuicios de los lectores y valida las nociones heteronormativas que consideran la homosexualidad una amenaza a los valores familiares y sociales.
¿Herir las susceptibilidades de quién? De los lectores de El Tiempo incapaces de concebir una sociedad equitativa y diversa. En vez de promover una visión objetiva, informada e incluyente, El Tiempo opta por presentar la homosexualidad como algo “hiriente” y arriesgado.
Las campañas de cerveza o ron que sexualizan su publicidad con imágenes eróticas de mujeres semidesnudas o, por otro lado, las revistas como Soho que en las filas de los supermercados muestran la desnudez, ésas sí que no hieren susceptibilidades. Claro, es que ese trabajo erótico, en tanto heterosexual, no hiere a nadie. Pues no es así.
Al presentar algunos cuerpos antecedidos de un prejuicio y a otros libres de tales connotaciones se hiere la susceptibilidad, pero no la de señores y señoras muy aseñorados, sino la de millones de colombianos LGBT marginados de los sistemas sociales, políticos y religiosos del país.
Así que hay dos opciones. O El Tiempo quita la advertencia y promueve una sociedad más justa o la redacta de esta manera: “Comunidad LGBT de Colombia, las siguientes imágenes tienen contenido explícito y pueden herir sus susceptibilidades, lo sentimos”.
Esos son los cuerpos desgarrados, los cuerpos vivos LGBTI que aún no han podido hablar.
Pero empezando porque el titular es impreciso. Así no es la rumba, uno no ve eso en todas partes ni todas las noches. Es un hecho que lo noticioso era el tema porno (por eso imprescindiblemente debían haber imágenes) pero por supuesto lo LGTB hace resaltar el exceso, lo transgresor y casi decadente visto desde lo heteronormativo.
Esta un poco mediocre el articulo…no todos tenemos que gozar con ese tipo de espectaculos.